La Isla de San Pietro forma el archipiélago de islas sulcitanas, junto a otras menores, al suroeste de Cerdeña. La «isla de la isla» es un lugar peculiar por varios motivos, el principal es que aquí se sigue hablando una lengua en extinción, el tabarquino. La historia de esta lengua dialectal es bien peculiar puesto que si bien procede de colonos africanos de la isla de Tabarca, procede originariamente de la población ligur de la república de Génova que ocupó el norte de África durante siglos y que con la huida ante las incursiones berberiscas, emigró a San Pietro. Aquí, a diferencia de en Liguria, el tabarquino se ha conservado junto a otras tradiciones, siendo hoy estudiado en las escuelas junto al italiano.
Que hacer
La isla es un lugar muy tranquilo, poco masificado y apto para hacer buceo, excursiones en barco e inmersiones submarinas. Cuando salgamos podemos relajarnos en las no muy numerosas playas de San Pietro: La más grande es la de Puntanera al este, Bobba al sur y la Caletta, a 10 km del municipio de Carloforte.
De hecho Carloforte es la única población relevante de la isla. Fundada por Carlos Manuel III en 1738, recibe el nombre de su fundador. Fortificada para resistir los ataques berberiscos, la inseguridad provocó que numerosos habitantes volvieran a huir, esta vez hacia la una isla frente a Santa Pola, en la costa española de Alicante, que curiosamente denominaron Tabarca.
En Carloforte la pesca de atún todavía es, aunque de forma mucho menos importante, uno de los motores de la ciudad. Maestros de la pesca atunera, los ejemplares son pescados, congelados y enviados directamente para el consumo en Japón. La explotación de minas de sal marinas y la artesanía de coral son otras dos actividades típicas de Carloforte.
Paseando por las calles tranquilas de Carloforte descubriremos la cultura tabarquina, pudiendo profundizar en el Museo Civico Casa del Duca. Luego podemos completarlo con la visita al fuerte de San Vittorio, que formaba parte del sistema amurallado de defensa del siglo XVIII. Finalmente, si bien apenas tiene interés arquitectónico, la iglesia de Nuestra Señora de los Esclavos alberga la imagen de la patrona, una Madonna Negra que según los fieles intercedió en la liberación de unos tabarquinos esclavizados por los piratas berberiscos que los llevaron en una de las frecuentes razzias.
En Cala Fico, una ensenada natural con forma de fiordo, los acantilados coronan la pequeña bahía, en un oasis de vegetación mediterránea, oasis de halcones y otras aves protegidas.
Fiestas
Anualmente se repite una de las fiestas gastronómicas por excelencia en la isla, la fiesta del Cuscus Tabarquino, que al igual que la fiesta de San Vito en lo Capo (Sicilia) recuerda la influencia árabe en la isla, transmitida en este caso con uno de los placeres gastronómicos más suculentos de Cerdeña.
El otro evento destacado de San Pietro es el Posidonia Festival, evento internacional de arte, promoción del desarrollo sostenible y cuidado del ambiente. Música y respeto de la naturaleza se fusionan en el mes de julio para recordarnos las joyas que tiene la isla de San Pietro.
Como llegar a la isla
Desde Portovesme y Calasetta en Sant’Antiocho parten ferries hacia Carloforte con las compañias Delcomar y Saremar.
Información de San Pietro
La oficina de información turística está en el Pro Loco de Corso Tagliafico 2.